Puede que el cielo perdiera sus
estrellas y las transformara en agua.
Ocultó su cara maquillandola con nubes
y nieblas.
Quizás cómplice de algún momento dejo caer en lágrimas estrellas
pérdidas.
Será por eso que al mirar al cielo no encuentro a tres amigas, a esas
tres musas de otras épocas.
Suelo detenerme, aun cuando manejo en
los atardeceres de soles que descienden sobre el río, y atento al cielo aguardo
el tiempo cuando la noche comienza y allí cuento cada estrella y un tanto
triste descubro aquellas ausencias
…quizás es recién viendo un espejo que
entiendo el momento, tres lágrimas comienzan el tibio manto que recorre mi
rostro.
Y será que aún creo en ese cielo, aun
siento cercana tu presencia, aun vuelo en la inocencia que quizás todo, incluidas las lágrimas y estrellas son solo un raro sueño del que aún no despierto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario